El sector de la promoción residencial en España sigue demostrando una gran madurez y profesionalización que se refleja en su adaptación a los signos de los tiempos y que sigue evolucionando de la mano de las nuevas necesidades de la sociedad. Si en 2019 se comenzó a impulsar los proyectos Build To Rent (BTR) destinados al multifamily desarrollándose promociones de viviendas en alquiler para terceros, en los últimos tiempos están cobrando fuerza otros conceptos residenciales ‘living, muy consolidados ya en otros países como EEUU, Alemania, Dinamarca o Reino Unido y que tratan de dar respuestas a nuevos nichos de mercado con otras necesidades y que requieren de un producto distinto.

La sociedad ha evolucionado mucho en las últimas dos décadas, se ha incrementado la diversidad de las tipologías familiares y de convivencia y, por tanto, se están generando respuestas distintas a necesidades diferentes.

No hace muchos años, la estructura familiar a la que se daba respuesta con nuestros inmuebles era única: familia con hijos que requiere una vivienda adaptada a esas necesidades a lo largo de toda la vida. Ahora, las nuevas modalidades de convivencia, la movilidad y otros cambios sociales como el teletrabajo o la mezcla de convivencia y ocio han generado necesidades más específicas que deben ser cubiertas por producto acorde a las mismas.

Atendiendo a esta realidad, los nuevos proyectos living se acomodan a las diferentes necesidades de alojamiento de la sociedad ofreciendo múltiples versiones: PBSA (Purpose Built Student Accommodation) -dirigidos a estudiantes-; formato multifamily tradicional, pero con más servicios; formatos flex living o coliving, dirigidos a jóvenes post grados o ejecutivos desplazados; senior living para mayores independientes; y residencias de mayores para aquellos que requieren de una mayor atención. Todos con un denominador común: representan soluciones residenciales alternativas al tradicional modo de convivir y enfocados a los distintos nichos de necesidades.