El director de la Red Sísmica Nacional, Emilio Carreño, ha destacado el alto grado de construcción eficiente que presentan los edificios del país ante los terremotos y su adaptación a las normas europeas para minimizar los daños de un seísmo, lo que ha confrontado con la falta de preparación social.
Ha subrayado, además, la necesidad de compartir conocimientos para que los efectivos que intervienen ante un terremoto conozcan los protocolos y ofrezcan tranquilidad a la sociedad.
Carreño ha destacado que España fue uno de los primeros países en establecer unas normas de construcción para minimizar los daños de un seísmo, como muestra una orden real firmada en Andalucía en 1884 que exigía ya entonces construir con unos mínimos para poder recibir ayudas frente a los daños de un terremoto.
España ha sido uno de los países «más responsable» en las exigencias de construcción, que se adaptan al «eurocódigo» con edificaciones «muy buenas», por lo que prevé que se resistiría «muy bien» a un terremoto de alta intensidad.
Noticia obtenida vía: “El Diario” en: