Actualmente hay en obras en Miralvalle, Juan Carlos I y el barrio de San Juan. En Dolores Ibárruri hay un proyecto para acometer por fases hasta 250 inmuebles.

La construcción, un barómetro que permite valorar la recuperación económica de la ciudad, «empieza a despuntar» en Plasencia. Lo afirma José Luis Iglesias, gerente de la Federación Regional de la Pequeña y Mediana Empresa de la Construcción (Pymecon) y se basa en las promociones de vivienda nueva que se están desarrollando actualmente y en las que están en proyecto.

Porque, desde hace unos años, no hay vivienda nueva en la ciudad, más allá de las promociones de particulares en la urbanización de Ciudad Jardín, que «hasta hace poco, era lo único que había», apunta Iglesias.

Ahora, estas promociones continúan, pero se le han sumado otras, aún de pequeño tamaño porque las constructoras no quieren arriesgarse y porque los bancos solo conceden financiación si el 80% de las viviendas están vendidas. «Se ha abierto más el grifo en cuanto a nivel de exigencia, pero la financiación todavía es un hándicap».

Así, las promociones rondan actualmente entre las 20 o 25 viviendas máximo. Una de las más difundidas ha sido la del edificio situado en las traseras de los pabellones militares, que acogerá además la sede vecinal del barrio de Miralvalle. Todos los pisos ahora en construcción en este bloque «están vendidos».

Así, Iglesias señala que la construcción «empieza a repuntar. Se van viendo cosas, aunque sigue incipiente y va más despacio de lo que nos gustaría».

No obstante, a lo ya en marcha podrían sumarse otros proyectos a corto/medio plazo, como una actuación urbanizadora que recibió el visto bueno municipal en el pleno del pasado viernes y que prevé la construcción de hasta un máximo de 250 viviendas en varias fases, en la avenida Dolores Ibárruri.

También hay intenciones de construir en los Altos de Valcorchero y frente al recinto ferial. Todo porque hay compradores interesados. «En Plasencia hay déficit de vivienda nueva y hay gente que prefiere una casa nueva a una de segunda mano y también poder elegir en qué zona vivir».

Porque la rehabilitación no ha tenido éxito de momento en la ciudad. «No acaba de arrancar porque como la vivienda nueva no hay nada».